Un titipuchal de escuincles de Santa Ana que visitaron el centro comercial de la ciudad ubicado a lo largo de la Calle Cuatro, se encontraron por las calles con el mismísimo Santa Claus, que acompañado de mariachis y de Nena, la payasita Doña Claus recorrieron negocio por negocio dando con los dueños y gerentes de los mismos su “aguinaldo” a los niños.
El aguinaldo es una tradición navideña que significa desear buenos augurios y el buen comienzo de un nuevo año. Hay varios tipos de aguinaldo, como el que en países como México suelen dar a los trabajadores como un pago extra de salario para sus gastos navideños.
Pero el “aguinaldo” más popular es la que practican en muchos lugares de América Latina los niños, yendo en grupo por las casas: cantando villancicos y canciones alusivas al aguinaldo, recibiendo de vecinos y la comunidad una moneda o en dulces.
La Asociación de Negociantes del Centro de Santa Ana, retomaron esta casi olvidada tradición navideña retomándola con fuerza y alegría, pues todos los dueños de negocio en el centro de la ciudad la abrazaron con entusiasmo entregándole a los niños más de $500.00 en el primer fin de semana.
Este fin de semana, mientras camina por la Calle Cuatro haciendo sus compras de Navidad, no se extrañe si de pronto sale a su encuentro Santa Claus acompañado de toda su clica ruidosa y cantadora entregándole aguinaldos a los niños al son de: Mi burrito sabanero, o Los peces en el río.