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La celebración del Cinco de Mayo lleva un siglo y medio de realizarse en numerosas partes de California y en otros estados de la Unión Americana. Nació espontáneamente en el Oeste de los Estados Unidos como una fiesta popular que con el tiempo fue cambiando hasta ser como la conocemos hoy en día de fiesta con mariachis y margaritas. “Es una tradición americana”, afirma
el Dr. David Hayes-Bautista, profesor e investigador de la Universidad de California, UCLA.

Mientras que en México se conmemora “la Batalla de Puebla” con actos cívicos, paradas mi-litares y desfiles de estudiantes organizados por los gobiernos locales y las escuelas públicas el día mismo del 5 de Mayo, en Estados Unidos se celebra “el Cinco de Mayo” el fin de semana más cercano con ferias populares de música y bailes típicos, organizadas por grupos civiles y culturales locales con patrocinio de marcas comerciales, y con fiestas en

cantinas y restaurantes de comida mexicana.
En Estados Unidos el festejo “Pertenece al pueblo y ha pertenecido al pueblo desde la Guerra de Secesión”, dice Hayes-Bautista, académico de la Escuela de Medicina de UCLA, quien ha investigado a fondo el tema y publicado en 2012 el libro “El Cinco de Mayo: An American Tradition”.
Los americanos de

todos los grupos culturales y étnicos, incluidos la mayoría de los latinos, “no saben que el festejo del Cinco de Mayo se inventó aquí, en los Estados Unidos”, dice Hayes-Bautista al explicar el título de su libro, con el que quiere ‘picar a los gringos’ que se preguntan ¿cómo que ‘An American Tradition’?, pues se piensa que es de mexicanos en Estados Unidos”.

Historia contada por los Californios
En la California de hace 150 años había una buena cantidad de periódicos en español: “Durante la guerra de secesión había La Voz de México, que se publicaba en San Francisco. El amigo del pueblo, que se publicaba en Los Angeles. El Eco del Pacífico y El Nuevo Mundo.
También en San Francisco La Voz de Chile y Las Repúblicas Hispanoamericanas. El Republicano y El Tiempo”, publicaciones en las que Hayes-Bautista se encontró con la historia hemerográfica de la Vieja Alta California.

El Cinco de Mayo, una tradición americana, es una historia con la que David Hayes- Bautista se “topó” mientras realizaba sus investigaciones en el campo de la sociología médica: “No soy historiador, soy epidemiólogo y demógrafo. Pero por mis investigaciones me topé con esa historia del Cinco de Mayo”, relata Hayes-Bautista:

“Estudio e investigo la paradoja epidemiológica latina. Y quise saber hasta dónde puedo históricamente divisar esa paradoja. Así que quise utilizar datos históricos. Me pregunté cómo sería la mortalidad infantil de los latinos durante la fiebre del oro. Nadie sabía nada, nadie tenía datos.

“Tenía que buscar y crear mi propia base de datos y utilicé la prensa en español, los periódicos publicados en California en español en esa época de la fiebre del oro y la guerra de secesión. Al principio los leía para sacar datos de nacimientos, bautizos, primeras comuniones, confirmaciones, matrimonios, cumpleaños, muertes, etc.

“Mientras sacaba los datos demográficos, en las columnas de alrededor leía de la ley del esclavo fugitivo aquí en California, luego leí del fallo de la Corte Suprema en el caso de Jim Crow que negaba derechos a lo no-blancos, luego que la artillería de los confederados abrió fuego. Y luego leí que los franceses llegan a México y que marchan hacia la ciudad de México. Y me dije, ¡caramba con estos datos, necesito compartir esta historia que estoy leyendo en los periódicos de la época!”

La historia contada por los Californios
En la California de hace 150 años había una buena cantidad de periódicos en español: “Durante la guerra de secesión había La Voz de México, que se publicaba en San Francisco. El amigo del pueblo, que se publicaba en Los Angeles. El Eco del Pacífico y El Nuevo Mundo. También en San Francisco La Voz de Chile y Las Repúblicas Hispanoamericanas. El Republicano y El Tiempo”, publicaciones en las que Hayes-Bautista se encontró con la historia hemerográfica de la Vieja Alta California.

El hallazgo no es poca cosa: La historia de California dicha “en las palabras de los latinos que aquí vivían. Contado por ellos”, asegura Hayes-Bautista, de manera que “mientras buscaba los anuncios de nacimientos, defunciones etc., me cayó encima la historia del Cinco de Mayo”.

El primer festejo que se tiene registrado de celebración del triunfo de la Batalla de Puebla se llevó a cabo en un pueblo minero al norte de California que ahora es un parque estatal, que se llamaba Columbia, en el condado de Tuolumne. “Fue el primer festejo espontáneo, había muchos. La Voz de México escribió que por todo el estado de California los latinos estaban festejando la victoria de la Batalla de Puebla.