Un repaso de las películas más taquilleras de la historia apenas ha encontrado correlación entre las más violentas y el número de asesinatos en los años siguientes a su estreno. En el caso de los juegos, la relación es incluso negativa. el aumento de su contenido violento ha coincidido con una reducción de la violencia juvenil en la vida real.

Una búsqueda en Google Scholar, la versión académica del buscador, muestra casi un cuarto de millón de referencias a estudios y libros sobre la violencia de los juegos o las películas y la violencia en la vida real. Por cada uno que sostiene que sus escenas violentas generan actos violentos, hay otro que afirma lo contrario. Aunque el debate no va a terminar con éste, un nuevo trabajo usa un enfoque diferente para determinar si existe una relación entre la violencia virtual y la real.

La mayoría de los estudios sobre el impacto de la violencia en el cine o los juegos se han realizado en el laboratorio. Se exponía a los participantes a escenas violentas y se observaba sus reacciones. Pero el profesor de psicología de la Universidad Stetson (Estados Unidos), Christopher Ferguson, ha buscado la conexión en la vida real, comparando la evolución de la violencia en los medios con las cifras de crímenes. Y lo ha hecho en dos estudios paralelos, uno para el cine y el otro para los juegos.