La suegra ¡De que las hay, las hay!

¡Hola de nuevo sobrinos! Ya estamos a fin de año y aquí seguimos atentos de ustedes. Decídanse a escribirme que ya vieron que aquí estoy pendiente de recibir justo la carta de alguien que necesita algunas palabras que
le puedan ayudar o que por lo menos se desahogue o le de ánimos.

Ahora se trata de Lucia, ella me cuenta que se casó y todo le pintaba muy bien, pero nunca contó con la participación de su suegra en la historia. Ella dice que la relación siempre fue cordial y que por eso no esperaba grandes diferencias, pero poco a poco todo se fue complicando. En resumen, la idea de la señora suegra es que ella tiene la misión de enseñarle todo a Lucia y hasta para dar a luz a sus niños le dio instrucciones. Todo está bien si Lucia hace todo al pie de la letra pero sino, ¡ya se podrán imaginar!

Lucia siempre la quiso tomar cuenta y por eso atendió varios de sus consejos pero para este momento si ella no hace lo que la señora suegra dice, hasta se enferma. ¿El esposo? Él piensa que su mamá está bien porque tiene más experiencia que su esposa y con frecuencia piensa que su esposa exagera.

A este punto Lucia ya quiere, ¡necesita un cambio! De inicio, de ninguna forma está mal que cada quien decida sobre su propia vida y la de su familia por sobre sus padres o suegros. Ellos merecen un lugar pero la responsabilidad es de cada pareja. No queda de otra más que cada quien asuma su rol y en este caso a Lucia le corresponde poner límites, de otra forma la familia se va a destruir en vez de crecer y unirse. Al principio va a ser difícil pero con respeto y amor como base se pueden hacer milagros, además de que Esposo asuma su papel de líder y establezca el bien familiar como prioridad y actúe delimitando el alcance que puede tener su mamá.

LA RECETA

La suegra ¡De que las hay, las hay!

Panecillos de plátano y cafecito para una buena platica para poner los puntos sobre las ies. 1 taza de harina integral, 1 taza de harina de coco, avena o almendra, 2 huevos, 1 barra de mantequilla, ½ taza de azúcar, polvos de hornear, pizca de sal, ¾ de taza de leche. Se mezcla todo y al horno por unos 25 minutos a 350 F.