El presidente Enrique Peña Nieto presentó una propuesta de reforma energética que modifica los artículos 27 y 28 de la Constitución mexicana en el que se confirma la propiedad de la nación sobre los recursos energéticos.
El mandatario federal indicó que con la reforma bajarán el precio de la luz y el gas y se producirán más fertilizantes para mayor producción en el campo, además de que las empresas serán más competitivas.
De acuerdo con la agencia de noticias Notimex, en el salón Adolfo López Mateos de la residencia oficial de Los Pinos, Peña Nieto subrayó que México tiene la posibilidad de emprender una reforma energética, capaz de transformar y elevar calidad de vida de todos los mexicanos.
Acompañaron al presidente de la República los secretarios de Energía, Pedro Joaquín Coldwell; de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; de Hacienda Luis Videgaray, entre otros integrantes del gabinete legal y ampliado.
Según publica el diario mexicano Milenio la iniciativa de reforma propuesta por el presidente parte de cinco puntos estructrurales que son:
1. Retoma el texto del Artículo 27, como lo dejó la reforma del presidente Lázaro Cárdenas y que fue modificado tras varias reformas.
– Contratos del utilidad compartida, que celebra el Gobierno de la República con Pemex y/o particulares, para exploración y extracción.
– Permisos del gobierno de la República con Pemex y particulares para refinación, petroquímica, transporte y almacenamiento.
2. Cambia el régimen fiscal de Pemex para que sea plenamente competitivo.
3. Reestructura Pemex y sus subsidiarias en dos divisiones: Exploración y Producción y Transformación Industrial.
4. Cambia las condiciones de transparencia y rendición de cuentas en Pemex.
5. Establece una política nacional de fomento a las compras de proveedores nacionales del sector hidrocarburos.
Con estas medidas se restituirán las reservas probadas de petróleo y gas al 100%, pues la producción iría acompañada de descubrimientos de yacimientos no someros que permitirían aumentar la producción. La producción de crudo aumentaría de 2.5 millones de barriles diarios a 3 millones para 2018 y a 3.5 millones o más para 2025, cifra histórica de producción en México.