El gobierno del estado mexicano de Guerrero, abrirá una oficina en la ciudad de Santa Ana para atender a los más de 3,000 guerrerenses que vi-ven en el condado de Orange. Así lo anunció Nezahualcoyotl Bustamante Santin, secretario de los Migrantes y Asuntos Internacionales del Estado de Guerrero, en entrevista con Miniondas realizada en el marco de su visita al condado de Orange para, entre otras actividades, participar en el evento del Cinco de Mayo que tuvo lugar en el parque La Palma de la ciudad de Anaheim el fin de semana pasado.
“Pronto tendremos esa oficina en California y será para todos los guerrerenses, sin sectarismos ni preferencias para ningún grupo, será una oficina abierta para todo mundo”, dijo el encargado de establecer lazos con los 800,000 guerrerenses y sus descendientes que viven en Estados Unidos. En el condado de Orange, los guerrerenses son el tercer grupo de mexicanos, seguidos de los zacatecanos y michoacanos.
En la fiesta de Cinco de Mayo en Anaheim “el estado de Guerrero apoyó con la presencia de siete artesanos guerrerenses, provenientes de las siete regiones del Estado, para mostrar lo original de cada región, como los afamados sombreros de Tlapehuala que son muy cotizados acá en los Estados Unidos y apreciados por los guerrerenses”, apuntó el secretario Bustamante. Otras artesanías guerrerenses presentes en la celebración del Cinco de Mayo en Anaheim fueron las cajitas de Olinalá, los tradicionales rebozos y los dulces típicos.
La presencia de Guerrero en Anaheim 5 de Mayo Fiesta, “resaltó las festividades de este año y le dieron un toque muy mexicano y tradicional al ambiente de celebración del Cinco de Mayo, ayudando a que fuera todo un éxito”, apunto Sandra Cervantes, organizadora del evento de Cinco de Mayo en Anaheim, y directora de Cervantes Publishing Company-Promotions.
El secretario de Asuntos de Migrantes de Guerrero, estuvo además en tres reuniones de trabajo y acercamiento con distintas comunidades del condado de Orange. La primera con empresarios México-americanos y guerrerenses, con los que se habló “de la necesidad y de las oportunidades de invertir en la zona de Tierra Caliente de Guerrero, y en la promoción de los atractivos turísticos del estado, para lo que el gobierno estatal estableció un fondo económico para promover las inversiones en el estado”.
La segunda reunión, dijo el secretario Nezahualcoyotl, “fue con las comunidades guerrerenses, con líderes y organizaciones, donde se discutió la propuesta de abrir una oficina del gobierno del estado en el sur de California, y la sede sería la ciudad de Santa Ana, donde se concentra la mayoría de los guerrerenses en el condado de Orange, unos 2000 según datos del consulado de Mé- xico y del alcalde de la ciudad, Miguel Pulido”.
Aunque en la ciudad de Los Angeles hay una alta presencia de guerrerenses, explicó Bustamante, “la alta concentración en el condado de Orange sugiere que sea Santa Ana la ciudad mas conveniente”. Entre los temas que fueron la agenda de la reunión comunitaria fue “el clamor, la demanda reiterada de que muchos guerrerenses no tienen ningún documento de identidad, por lo que no pueden ni obtener los documentos de identidad mexicana como la matricula consular o el pasaporte”, dijo de una de las tantas preocupaciones que se lleva a Mé- xico para ser resueltas por el gobierno del estado.
Una tercera reunión de trabajo fue en Santa Ana con líderes migrantes, de quienes recogió otra serie de demandas y preocupaciones como el tema de la repatriación de cadáveres a Guerrero, para lo que algunas organizaciones han venido realizando por años actividades de recaudación para apoyar a las familias de los deudos a regresar el cuerpo de sus familiares para ser sepultados en su tierra natal.
El estado de Guerrero es el quinto estado receptor de remesas de México con $1,239 millones de dólares al año. El licenciado Nezahualcoyotl Bustamante Santín es secretario de los Migrantes y Asuntos Internacionales del Estado de Guerrero desde octubre de 2011.
Su oficina atiende no sólo la migración de guerrerenses a los Estados Unidos, también la migración interna, como los 35,000 jornaleros agrícolas que migran al norte de México al trabajo de recolección en las agroindustrias de Chihuahua, Sonora y Sinaloa.