¿Cómo es el asma?
El asma es una enfermedad que afecta los pulmones. Es una de las enfermedades de duración prolongada más comunes en los niños, aunque los adultos también pueden padecerla. El asma causa sibilancias, dificultad para respirar, opresión en el pecho y tos durante la noche o temprano por la mañana. Si usted tiene asma, tendrá la enfermedad todo el tiempo, pero sufrirá ataques solamente cuando algo afecte sus pulmones.
No sabemos la causa del asma en la mayoría de los casos y tampoco cómo curarla. Sí sabemos que si algún familiar suyo tiene asma, usted tiene más probabilidades de tener esta enfermedad.
¿Cómo puede saber si tiene asma?
Puede ser difícil determinar si alguien tiene asma, especialmente si se trata de niños menores de 5 años. Un examen médico sobre el funcionamiento de sus pulmones y de detección de alergias puede ayudarle a saber si tiene asma.
Durante el chequeo, el doctor le preguntará si tose mucho, en particular durante la noche, y si los problemas que tiene para respirar empeoran después de realizar una actividad física o durante ciertas épocas del año. El médico también le preguntará si tiene síntomas como opresión en el pecho, sibilancias y resfríos que duren más de 10 días. Asimismo le preguntará si algún miembro de su familia tiene o ha tenido asma, alergias u otros problemas respiratorios y le hará preguntas sobre su casa. El doctor también le preguntará si ha tenido que ausentarse de la escuela o el trabajo y sobre cualquier tipo de problema que pueda tener cuando hace ciertas cosas.
¿Qué es un ataque de asma?
Además, el médico le hará una prueba respiratoria, llamada espirometría, para determinar si sus pulmones funcionan bien. El médico usará una computadora con una boquilla para medir cuánto aire puede exhalar después de inhalar profundamente. El espirómetro puede medir el flujo de aire antes y después de tomar medicamentos para el asma.
Un ataque de asma puede incluir tos, opresión en el pecho, sibilancias y dificultad para respirar. El ataque de asma ocurre en las vías respiratorias, que son los conductos que llevan el aire a los pulmones. A medida que el aire pasa por los pulmones, las vías respiratorias se van haciendo más pequeñas, como las ramas de un árbol al alejarse del tronco. Durante un ataque de asma, las paredes de las vías respiratorias en los pulmones se inflaman, lo cual hace que las vías se vuelvan más estrechas. Menos aire entra y sale de los pulmones, y el cuerpo produce una mucosidad que obstruye aún más las vías respiratorias.
Usted puede controlar el asma si reconoce los signos de advertencia de un ataque, evita el contacto con las cosas que pueden causar un ataque y sigue las recomendaciones de su médico. Cuando controle el asma:
- no tendrá síntomas como sibilancias o tos;
- dormirá mejor;
- no se ausentará del trabajo o la escuela;
- podrá participar en todas las actividades físicas y
- no tendrá que ir al hospital.