Salma Hayek tiene 47 años y luce como si tuviera 10 menos. Dice que la belleza no es su prioridad y que no le asusta envejecer, ¿le creemos?
La actriz mexicana aparece en la portada de la edición de julio de InStyle, luciendo hermosa como es su costumbre. En entrevista con la publicación, la mexicana se confesó sobre asuntos de belleza, estilo y edad, e incluso les dio unos consejitos a las mujeres.
Salma dice no ser una experta en moda pero asegura poner mucho esfuerzo en lucir bien para su esposo, François-Henri Pinault. “Quiero que se sienta atraído hacia mí”, aseguró Hayek, quien en la foto de portada luce un vestido rojo con la espalda descubierta.
“Cuando cumplí 40, empecé a pensar ‘este es el último año’, cada vez que me ponía un vestido strapless”
A Salma siempre la vemos dándole variantes a su look, eligiendo vestidos de distintos cortes, a veces con cuello alto y otras incluso sin tirantes. Sobre esto, la actriz señala que ella siempre pensó que a cierta edad debía dejar de usar vestidos strapless.
¿Y cómo es que consigue salirse con la suya? ¿Cómo es que logra verse siempre fabulosa? Según ella, podría hacer más al respecto, pero lucir linda no es su prioridad.
“Podría hacer mucho más –ejercicio, o no comer postre. O no tomar alcohol. Podría hacer esfuerzos más grandes. No creo que mi prioridad en la vida alguna vez haya sido la belleza. Es como un espíritu rebelde en mí”.
Salma se acerca cada vez más a los 50 pero sabe que la edad y la apariencia no deberían quitarle el sueño. “Yo creo que si le temes a la edad, envejecerás más rápido”.
Y la también empresaria y productora cree que todas las mujeres deberían ser más gentiles con ellas mismas cuando se trata de su aspecto físico. “Debes aceptar quién eres y amar quien eres y hacer lo mejor que puedas con lo que tienes”.
“Suelo usar mucho cuero en las alfombras rojas”, comparte la actriz. “A mi esposo le encanta cuando lo uso”.
Hayek también revela que, aunque está en sus cuarenta y tantos, hay algunos estilos que simplemente se niega a dejar de usar.
“Cuando cumplí 40, empecé a pensar ‘este es el último año’, cada vez que me ponía un vestido strapless”, dice. “Siempre pensé que una no los puede usar después de cierta edad, pero todavía me salgo con la mía”.
Y más allá de todos los diseños de alta costura que ha lucido a lo largo de su carrera, la actriz mexicana no busca la aprobación del mundo de la moda, sólo de su esposo.
“No soy una fashionista”, comparte. “Tengo buen ojo (para la moda). Puedo combinar bien, pero gran parte del esfuerzo lo hago por mi esposo, porque quiero que él se sienta atraído a mí”.
Hayek aseguró que el tema de la belleza física nunca ha sido una prioridad en su vida sino el interior, tener un espíritu rebelde.
“Sé que la gente siempre ha pensado que era hermosa, pero nunca traté de ser lo más bella posible. Podría hacer mucho ejercicio, o no comer postre o no beber alcohol. Podría hacer esfuerzos más grandes. No creo que mi prioridad en la vida haya sido la belleza. Hay en mí algo de espíritu rebelde. Hay más en mí que la imagen, por supuesto”, explicó a la revista InStyle .
En la edición de julio dedicada a la actriz mexicana de 46 años, también comenta que considera que mientras la gente se preocupa más por envejecer, lo hacen más rápido.
Aconsejó a las mujeres amar lo que son y hacer lo mejor que puedan con lo que tienen: “Deben tener un sentido del humor acerca de lo que son y darse un respiro”.
“Mi marido jura que me ve mejor ahora que hace 10 años.” finaliza.