La mayor cantidad de lluvia que haya caído en casi un año podría registrarse durante la primer tormenta de la temporada, por lo que las autoridades se preparan para responder a posibles deslizamientos de tierra.
LOS ÁNGELES, California.- La primer tormenta de la temporada que se pronostica azotará al sur de California de lunes a miércoles ha elevado el nivel de alerta para las zonas devastadas por los recientes incendios forestales, ya que se podrían presentar deslizamientos de tierra.
Durante esos tres días Los Ángeles recibirá alrededor de 2 pulgadas de precipitación pluvial, de acuerdo con el pronóstico del Servicio Nacional de Meteorología (NWS).
Esa sería la mayor cantidad de lluvia registrada en casi un año, desde la poderosa tormenta del 17 de febrero de 2017, cuando se alcanzaron 2.01 pulgadas de agua y cuatro personas murieron.
La tormenta que se espera para los próximos días termina con una sequía de 10 meses en los que sólo se registró 0.69 pulgadas de lluvia.
Ese período, del 1 de marzo al 31 de diciembre de 2017, ha sido el más seco que ha experimentado Los Ángeles desde el año de 1878, destacó el NWS.
La lluvia puede provocar el reblandecimiento de tierra en las áreas quemadas por los incendios Creek, La Tuna, Rye y Skiball, por lo que existe un gran potencial de derrumbes en laderas.
Las autoridades temen que en las zonas devastadas por los recientes incendios se registren aludes de lodo y escombros, así como desgajamiento de cerros e inundaciones, por lo que están pidiendo a los residentes tomar medidas de protección, como la colocación de costales de arena, y estar preparados para evacuar sus viviendas.
Las posibles inundaciones de calles y pasos subterráneos podría desquiciar aún más el tráfico matutino del martes, cuando se espera que continúe la lluvia acompañada de fuertes vientos.
La tormenta podría disiparse para la noche del miércoles, dejando temperaturas más cálidas, con la posibilidad de que el agua de lluvia regrese la próxima semana.
Fuente: univisión.com
Imagen: La lluvia en Los Ángeles, tan benéfica como destructiva. FREDERIC J. BROWN/AFP/Getty Images